Necesitas un cambio de disco duro

Cualquiera que tenga un conocimiento básico sobre informática sabrá que su ordenador tiene lo que se llama un "Disco Duro", simplificando mucho podemos decir que un disco duro es donde se almacenan todos nuestros datos de forma permanente y parece más que obvio que es un componente esencial pues contiene lo más importante.

Ahora bien, es increíble lo poco que han evolucionado los discos con respecto a otras tecnologías como puede ser las tarjetas gráficas o los procesadores, este tipo de dispositivos han estado un poco rezagados con respecto a sus hermanos, pero de un tiempo a esta parte esto ha empezado a cambiar y de que manera.

Disco duro mecánico

Los discos duros de forma tradicional han tenido un funcionamiento denominado mecánico, los discos de datos mecánicos han existido desde siempre y si bien su tecnología fue evolucionando y refinándose el funcionamiento básico se mantuvo inalterado. Dicho sistema podría compararse salvando las distancias con el de un reproductor de discos de aguja “de toda la vida”.

Al igual que un toca discos un disco duro mecánico tiene un "brazo" que se denomina "actuador", dicho brazo debe moverse hasta un punto específico del disco donde leerá o bien grabará información, dependiendo de la velocidad a la que gire el disco y se pueda mover, de forma precisa, el actuador obtendremos más o menos velocidad, pero al final del día son piezas mecánicas que se mueve, por lo que la velocidad llega a una especie de muro insalvable, pues hacer actuadores ultrarrápidos es impráctico pues su vida útil se acortaría sensiblemente por no hablar de que tendrían unos precios absurdamente altos.

La llegada de los SSD

Aunque el sistema anteriormente descrito ha funcionado de forma excepcional durante muchísimos años, estaba claro que ya había llegado a su máximo rendimiento y era necesario cambiar a una nueva tecnología con la que pudiéramos alcanzar nuevas cotas de rendimiento.

Esto se consiguió con la llegada de los discos de estado sólido o SSD, en esencia hacen lo mismo que un disco duro mecánico, almacenar datos, pero este caso no hay disco girando, no hay actuador mecánico moviéndose, carece de piezas móviles. Todo se basa en chips de memoria NAND Flash, que tiene unas velocidades de lectura y escritura muchísimo más altas y que gracias a la evolución tecnológica y la economía de escala su producción ha ido aumentando y por tanto abaratándose a pasos agigantados y esto es clave para cualquier innovación técnica, llegar a ese punto dulce en que se pueda fabricar de forma masiva.

Como ya hemos dicho los discos SSD actualmente constituyen una tecnología más rápida y fiable que un disco duro mecánico convencional, podemos decir que son mejores en casi todos los aspectos.

No es el fin para los discos mecánicos

Pues no todo es perfecto con los SSD aún queda el factor precio, a igualdad de capacidad un disco duro de estado sólido siempre será más caro que un disco mecánico tradicional, aproximadamente es 4 veces más caro, es decir por el precio de un HDD tradicional de 1 Terabyte, obtienes un SSD de aproximadamente 250GB (la cuarta parte) así pues la principal variable a la hora de elegir uno u otro es el uso que le vamos a dar.

Si buscamos una unidad de almacenamiento para que albergue el sistema operativo y los programas de uso cotidiano, sin duda debemos buscar un SSD rápido, pues esto tendrá un gran impacto en el rendimiento de los programas y que todo vaya más fluido y se note mas responsivo.

Ahora bien, si por el contrario estamos buscando almacenamiento para mucha información, en este caso buscaremos un “cuanto más grande mejor” y sería más apropiado un disco duro mecánico, fácilmente encontramos discos de 2, 4, 6 Terabytes a precios “razonables” y hay de muchísima más capacidad.

Conclusión

No es una guerra, al final del día estas 2 tecnologías se complementan, por un lado tenemos discos rápidos y pequeños por otro tenemos discos lentos pero enormes, como suele decirse “la unión hace la fuerza” usemos lo mejor de los 2 mundos para nuestro provecho, es por ello por lo que recomendamos que se revisen las unidades de almacenamiento de nuestro PC y se instalen discos SSD, pues el salto de rendimiento es impresionante, especialmente en portátiles y equipos de sobremesa algo viejos, los cuales experimentan una segunda juventud, rindiendo mejor que nunca.

Si necesitas ayuda para cambiar el disco de tu portátil o PC, o tienes más preguntas no dudes en ponerte en contacto con nosotros te atenderemos encantados y tendrás presupuestos sin compromiso, déjanos ayudarte, llámanos.

© in4 asistencia informática - 2020